Lo prometido es deuda. Aquí estoy de nuevo para presentarles el proyecto que me tiene consumida de tiempo completo. Se trata de karinaausecha.com, la oficina virtual desde la cual asesoro a pequeñas y a medianas empresas al otro lado del charco, en temas de branding y comunicación.

¿Cómo decidí emprender?

La idea no surgió de la noche a la mañana. Lo venía buscando desde hace algunos meses, cuando hice conciencia que dentro o fuera de Colombia quería hacer con mi tiempo y mi energía algo que realmente me llenara.

Soy periodista y comunicadora social. Quienes me conocen saben que me apasiona mi carrera y que la escogí, aún cuando sabía que no sería fácil abrirme campo en un medio tan competitivo. Por fortuna y trabajo constante, desde que puse un pie por fuera de la universidad siempre tuve un empleo formal.

Realmente supe lo que era estar desempleada cuando llegué a Alemania. Nunca me imaginé que me tomaría tanto tiempo aprender alemán y buscar un nuevo camino profesional. Sin embargo, ese tiempo de búsqueda me llevó a explorar otras habilidades que desconocía y a pensar en nuevas formas de ejercer mi carrera.

A este blog le debo la idea de emprender, porque a través de este canal me he conectado con otros bloggers y emprendedores, que también están buscando la manera de trabajar haciendo lo que les gusta.

Aunque al principio no sabía qué productos o servicios podía ofrecer, las ideas fueron llegando cuando me enfoqué en mis talentos y mis habilidades. Dejé de pelear con mis debilidades y simplemente me dediqué a analizar cómo podía potenciar eso que hago bien, para resolver una necesidad del mercado.

En esa búsqueda me encontré con un empresario dedicado a los negocios online que necesitaba una persona con mi perfil profesional. No le importaba en qué parte del mundo estaba o si el trabajo lo hacía de día o de noche. Lo que le interesaba era mi talento en comunicaciones y lo que yo podía hacer por el crecimiento de su empresa.

Esa experiencia me abrió los ojos sobre la modalidad de trabajo online y me hizo entender que yo también podía emprender. No necesitaba inventarme la rueda, porque mi pequeña innovación estaba en la calidad de mis servicios y en el uso de las nuevas tecnologías para llegar a mi público objetivo.

Quienes me siguen por redes sociales pudieron darse cuenta que durante el viaje que hice con mi madre por Europa seguí conectada al trabajo. No es lo ideal y tampoco lo recomiendo porque después del viaje uno llega más cansado. Pero en ese momento, la experiencia me sirvió para ver que sí podía trabajar desde cualquier lugar del mundo, porque mis talentos y habilidades viajan conmigo. Lo indispensable es: contar con una buena conexión a internet y viajar con equipo liviano.

No se si hubiera emprendido estando en Colombia o si hubiera dejado mi trabajo para montar mi propia empresa. De lo que estoy segura en este momento es que no me imagino otro presente diferente al que estoy viviendo.

Emprender en eso que te apasiona

Ser tu propio jefe no siempre es fácil porque debes ser multitareas y tu propio coach para no perder la motivación. Así que mi primer consejo para quienes desean arriesgarse y seguir este camino es que lo hagan en algo que realmente les guste y en lo que sean buenos. Si no funciona, al menos será entretenido. Además cuando uno se dedica a eso que le apasiona, siempre encuentra motivos para hacer los deberes, aún cuando se trata de actividades que no nos gustan, pero que hacen parte del paquete.

Y no esperen el momento perfecto para empezar porque no existe. Si tienen una idea, trabajen en desarrollarla y aterrizarla, porque una idea lleva a la otra y cuando menos lo esperen ya tienen su proyecto para empezar a volar.

Para quienes desean emprender en Alemania tengo otro par de tips que a lo mejor les pueden servir:

• Antes de empezar cualquier emprendimiento, les recomiendo que se informen sobre todos los requisitos legales que deben cumplir y cuánto les puede costar llevar a cabo ese negocio (con todo lo que implican permisos, asesores, impuestos etc.). Las fuentes de información dependen en gran medida del tipo de negocio y si ejercen una profesión regulada o no. Sin embargo, pueden buscar información en el Gewerbeamt de su ciudad, en el Handelskammer y ante el Finanzamt. Les recomiendo que lleven las preguntas concretas, para que los orienten mejor (además son más amables si se dan cuenta que uno ya hizo la tarea de buscar previamente).
• Pueden buscar información general en sitios web como Portal Alemania o preguntar en los foros de emprendedores en Alemania (En Facebook encontré estos: Autónomos, emprendedores y empresarios españoles en Alemania / y Emprendedores & Empresarios Colombianos en Alemania). Pero no se queden con esa información, porque en los foros cada quien habla desde su experiencia y puede ser que su caso sea distinto.
• Personalmente considero necesario buscar un Steuerberater (asesor de impuestos). El asesor que conseguí me aclaró varios temas que desconocía o de los cuales no estaba muy segura: por ejemplo, cómo debo llevar la facturación de mi negocio y las condiciones que debo cumplir siendo empresa pequeña.
• Para quienes desean emprender en internet les recomiendo visitar este sitio: www.e-recht24.de.Encontrarán información de mucho valor sobre los aspectos legales que debemos tener en cuenta quienes tenemos un negocio virtual y vivimos en Alemania.

PD: este es mi último post en Al otro lado del charco. Seguiré escribiendo en mi nuevo blog en www.karinaausecha.com. Allá los espero. Igualmente, en mis redes sociales estaré siempre para responder sus dudas y comentarios.

Por último les comparto una reflexión que escribí hace algunos días y que me identifica en este momento de mi vida:

“Busco nuevos horizontes, mientras disfruto de mi día a día, de mis rutinas, de la posibilidad de elegir qué hago con mi tiempo, de reinventarme profesionalmente y de seguir creciendo hacia un futuro que desconozco pero que me emociona”.

Saludos y como siempre ¡gracias por leer!